
Es verdad que estamos en una especie de crisis, es verdad que perdimos y que nuestro próximo partido decide mucho, es verdad que a muchos no les gusta como juega el equipo, que los refuerzos fueron elegidos sin criterio, que el esquema del DT es mezquino, que no pone al equipo que gusta, que los dirigentes son pisoteados por ANFA con sospechosas decisiones, que las entradas están caras, etc. Todo es verdad, pero es en estos momentos cuando surge una palabra, Temple.
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Con vergüenza noto que el apoyo al fútbol en nuestra ciudad es mínimo, que las empresas no se ponen como deberían por la exigencia de una cosa llamada responsabilidad social que pareciera no cuaja mucho en las contabilidades, que la gente está desencantada o que la única radio valdiviana decida no seguir transmitiendo el segundo tiempo por "otros compromisos"... ¿cómo se puede criticar algo que marcha con tan poco?... ¿estamos todos habilitados para exigir? ¿y si no damos nada?... si somos los mismos que vamos al estadio y nos frustramos o nos esperanzamos, si somos los mismos los que viajamos cuando podemos, si somos los mismos que trabajamos informando... y si somos los mismos los que debemos unirnos para salir de esta ¿por qué no mejor unirnos y trabajar y trabajar y trabajar? Porque a mi no me queda duda de que el único patrimonio de nuestro club es su gente.
A principio de año los invitaba a creer, a todos, a intentar a hacer algo y aportar de algún modo a este club que nos congrega a un espectáculo valdiviano 100%, algo pura y completamente valdiviano, como hay pocas cosas en esta ciudad, por lo mismo que vergüenza que un medio de comunicación prefiere dar canciones cebolleras y comerciales en lugar de fomentar el deporte... Valdivia si quiere crecer necesita más que críticas, nuestro Torreón necesita a su gente unida y el apoyo de los que pueden y tienen los medios, no es fácil hacer maravillas con poco, por eso tenemos que apoyar, ahora más que nunca.
Pero eso si, aunque los de siempre nos cuadramos con nuestro equipo, nosotros no somos ciegos y las evaluaciones ya vendrán con toda la rigurosidad que nos otorga la pasión por nuestros colores.
Sea como sea ¡Aguante Torreón mierda!, que clasificamos como sea.
por Jorge.
les dejo un recuerdito alegre!